9 Alimentos Tóxicos para los Gatos

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Hemos escrito sobre la importancia de una dieta adecuada para tu gato. Hablé de qué alimentos y productos ERAN buenos para tu gato, pero no mencioné realmente los alimentos peligrosos y tóxicos para los gatos.

Pensé que un tema tan importante es mejor escribirlo tarde que nunca. Cuando su felino favorito le pone esos ojos tristes de gatito mientras está de pie junto a la mesa de la cena, es posible que tenga la tentación de darle a su peludo amigo una pequeña muestra de su comida. O quizás hayas preparado una comida y hayas dejado que tus mascotas se ocupen de los restos del suelo. Es mejor que barrer, ¿verdad?

Compartir la comida con tu gato puede parecer relativamente inofensivo, pero aparte de fomentar malos comportamientos de mendicidad y posiblemente incluso un aumento de peso poco saludable, en realidad podría estar poniendo en riesgo la salud general y la vida de su gato.

Hay un par de ingredientes y alimentos que los humanos consumen a diario, como el chocolate, la leche y la cebolla, que pueden desencadenar reacciones tóxicas peligrosas en los gatos.

Este artículo analiza algunos alimentos más comunes, pero no es en absoluto una lista exhaustiva. Como regla general, en caso de duda, no se lo dé a su gato. Como siempre, si tiene alguna duda o preocupación sobre la salud o la dieta de su gato, consulte con su veterinario.

Alimentos tóxicos para los gatos

He aquí 9 alimentos humanos cotidianos tóxicos para los gatos. Empecemos por los alimentos que parecen más inofensivos:

La leche o los productos lácteos

Hemos visto adorables fotos de gatitos y gatos lamiendo alegremente un tazón de leche. A muchos nos han enseñado incluso que la leche es importante en la dieta de un gato.

En realidad, ese tazón de leche puede suponer un problema. La verdad es que los gatos son intolerantes a la lactosa una vez que se hacen adultos. Esta incapacidad para descomponer la lactosa de los productos lácteos significa que su gato puede acabar teniendo diarrea.

Estar enfermo puede llevar a la deshidratación e incluso puede requerir una estancia en el veterinario si no se trata rápidamente. La leche nunca debe utilizarse como sustituto del agua fresca. Evite dar a sus gatos cualquier crema o leche, a menos que elija opciones sin lactosa.

Pescado

El pescado es saludable, ¿verdad? No es así. El atún, cuando se convierte en alimento para gatos, es perfectamente bueno para ellos. Por el contrario, el atún que se vende para el consumo humano puede provocar trastornos digestivos, incluso cuando se le da como premio ocasional en pequeñas cantidades.

El atún no tiene cantidades adecuadas de vitamina E. Esto puede provocar una enfermedad llamada esteatitis felina (también conocida como enfermedad de la grasa amarilla).

El atún tiene un sabor y un olor muy fuertes, por lo que muchos gatos pueden volverse adictos a él. El problema puede ser grave porque estos adictos al atún pueden negarse a comer cualquier otra cosa.

Otro problema de una dieta constante de atún es que existe el riesgo de envenenamiento por mercurio. Si decide incorporar el atún a la dieta de su gato, hágalo de forma muy controlada y limitada.

El pescado crudo contiene una enzima llamada tiaminasa que destruye la tiamina (una de las vitaminas B esenciales). Una deficiencia de tiamina puede provocar pérdida de apetito, convulsiones, coma y muerte.

Aunque la cocción del pescado destruye la enzima, una dieta constante de pescado no proporciona las cantidades adecuadas de vitaminas y minerales necesarios. No es nutricionalmente completa.

El pescado no es una dieta equilibrada para los gatos, a menos que estén expuestos a él a través de los humanos o si es su única fuente de alimento. También existe el riesgo de parásitos internos cuando se alimenta con pescado crudo.

Recortes de grasa

La grasa puede ser buena en pequeñas cantidades, pero dar a su gato un montón de grasa recortada de ese filete que acaba de freír no es una buena idea. Podría causarle problemas estomacales, incluyendo vómitos y diarrea.

Aunque la grasa no es tóxica para los gatos en sí misma, no es saludable alimentar a su gato de forma rutinaria con una dieta rica en grasas animales, ya que le provocará obesidad. Las grandes cantidades de grasa también pueden causar pancreatitis. Lo mejor es limitarse a los alimentos aprobados para gatos.

Cebollas, Ajos y Cebollinos

Condimentos comunes, como las cebollas, el ajo y el cebollino, pueden crear problemas a sus mascotas al desencadenar una irritación en su tracto gastrointestinal, lo que puede provocar graves daños en los glóbulos rojos, ataques de asma e incluso daños en el hígado.

Se considera que los gatos son dos veces más susceptibles que los perros a los componentes tóxicos del allium que se encuentran en las cebollas y el cebollino, que pueden dañar los glóbulos rojos, aunque el gatito solo consuma una pequeña cantidad.

No importa si la cebolla está cocida, cruda o en polvo. Los gatos no metabolizan estos compuestos. Por esta razón, los propietarios deben ser cautelosos cuando ofrezcan a sus gatos comida para bebés humana para estimular el apetito. Puede contener cebolla en polvo, que podría provocar anemia en los felinos.

Chocolate

Aunque el chocolate es una de nuestras golosinas favoritas, debe ser evitado por los gatos.

El chocolate y los productos de chocolate contienen sustancias denominadas metilxantinas, que se encuentran en las semillas de cacao, el fruto de la planta con la que se hace el café, y en los frutos secos de un extracto utilizado en algunos refrescos.

El chocolate más oscuro es más peligroso que el chocolate con leche. El chocolate blanco tiene el nivel más bajo de metilxantinas, mientras que el chocolate de repostería contiene el más alto.

El chocolate también contiene teobromina, una sustancia química que es tóxica para los gatos en grandes cantidades. Incluso unas pocas onzas de chocolate pueden ser suficientes para provocar una enfermedad en un gato, por lo que ninguna cantidad o tipo de chocolate debe considerarse «seguro» para su consumo.

La toxicidad del chocolate puede provocar vómitos, diarrea, ritmo cardíaco rápido o irregular, jadeo, sed y micción excesiva, inquietud, temblores musculares y convulsiones. La muerte puede producirse a las 24 horas de la ingestión.

Pasas o uvas

Las pasas son un bocado delicioso y saludable para las personas, pueden ser venenosas para los gatos. Se desconoce cuáles son los agentes tóxicos de estas frutas. Un puñado de pasas puede provocar un fallo renal repentino en su gato.

Debe evitar dar a su mascota pasas, así como uvas, y estar atento a los signos de toxicidad si su gato las come accidentalmente.

Los signos que suelen aparecer en 24 horas son diarrea, falta de apetito, letargo, debilidad, dolor abdominal y disminución de la micción.

Otros signos de enfermedad están relacionados con la eventual interrupción del funcionamiento de los riñones.

Huevos crudos

De forma similar a las personas, el consumo de huevos crudos puede provocar salmonelosis en los gatos. Los síntomas de la enfermedad varían, pero pueden incluir vómitos, diarrea y letargo.

La salmonela también puede transmitirse a los humanos desde los animales, por lo que es aún más importante mantener a su gato alejado de los huevos y lavarse correctamente las manos después de hornear o cocinar con huevos crudos.

El alcohol

Hay un dicho que dice: La cerveza, antes que el licor, nunca enferma; el licor, antes que la cerveza, nunca teme. Ese dicho puede estar bien para las personas, pero para los animales, la cerveza, el vino o el licor son todos peligrosos.

Los efectos secundarios del alcohol en un gato incluyen vómitos, diarrea, depresión del sistema nervioso central, problemas de coordinación, problemas respiratorios y temblores. En casos extremos, el gato puede entrar en coma o morir.

El nivel de envenenamiento suele depender de la cantidad de alcohol consumida y del peso del gato, pero lo cierto es que no tiene ninguna gracia poner un cóctel al alcance de su gato. Y si tu gato ingiere algo de licor, no le dejes simplemente «dormir la mona». Llama a tu veterinario para que te aconseje.

Xilitol

Puede que la palabra «xilitol» no le diga mucho, pero es un edulcorante artificial que se utiliza en un gran número de productos que probablemente tenga en su casa, en su bolso o en su bolsillo.

Entre ellos se encuentran algunos caramelos, chicles, la mayoría de los productos dietéticos, como las galletas sin azúcar, e incluso ciertos tipos de pasta de dientes. No hace falta mucho para desencadenar una reacción en su mascota… y los síntomas pueden aparecer rápidamente y a menudo son mortales.

El xilitol provoca la liberación de insulina en la mayoría de los animales, lo que provoca hipoglucemia (niveles bajos de azúcar en sangre). Los signos de la ingestión incluyen vómitos, problemas de coordinación y letargo.

Estos síntomas pueden progresar hasta convertirse en convulsiones e incluso en insuficiencia hepática en pocos días.

Evite poner platos de golosinas en su casa y vigile a su gato durante las fiestas como Halloween y Pascua, en las que es más probable que haya golosinas.

Alimentar con una dieta vegana

No todos los carnívoros son obligatoriamente carnívoros. De hecho, la mayoría no lo son. Pero los gatos sí lo son. Como carnívoros obligados, los gatos no pueden digerir eficazmente los alimentos de origen vegetal, ni los alimentos de origen vegetal proporcionan los nutrientes que los felinos necesitan.

Los tractos digestivos de los herbívoros y los omnívoros son muy diferentes de los de los carnívoros y pueden adaptarse a una gran cantidad de opciones dietéticas, pero para los verdaderos carnívoros, este no es el caso.

Los carnívoros obligados, también conocidos como «verdaderos carnívoros», son literalmente eso. Animales que, por su condicionamiento genético, deben comer una dieta basada en la carne para prosperar. Privar a un gato de carne es irresponsable, poco ético y, en última instancia, perjudicial para su salud.

El tracto digestivo felino es corto e incapaz de procesar los nutrientes contenidos en la materia vegetal.

Las proteínas vegetales NO contienen todos los aminoácidos críticos para la salud de los carnívoros obligados, y a diferencia de los humanos, que tienen la capacidad fisiológica de convertir las proteínas vegetales en las piezas que faltan para un perfil de aminoácidos completo, los gatos no tienen esa capacidad.

Las proteínas de los tejidos animales tienen un perfil de aminoácidos completo. Los aminoácidos son los componentes básicos de las proteínas.

Una dieta que carezca de las cantidades adecuadas de carne provocará graves deficiencias y posiblemente la muerte. Si usted es vegetariano, no debe incluir a su gato en ese modo de vida o sufrirá.

No hay que hacer concesiones en este sentido. Los gatos necesitan carne. Punto. Consiga un conejo o un hámster si siente la necesidad de alimentar a su mascota con una dieta vegana.

Francisco Javier García García
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